viernes, agosto 08, 2025

VALLADOLID .JULIO 2025

 Este puente de Santiago hemos hecho una escapadita cómoda a Valladolid. En una hora desde Madrid en AVE te plantas en el centro de la ciudad.

Hemos tenido mucha suerte con el tiempo pues estaba despejado pero con unas temperaturas buenísimas para esta época (entre 20 y 25 grados).

Como Ramón (que trabaja todavía) llegaba a las 15:30, reservamos una mesa para comer en un restaurante cerca de la estación. El lugar, que lo encontramos a través de Google, se llama Gastrobar Sabores. Una gran "bombonera" acristalada pegada al Parque Campo Grande muy agradable. Está especializado en arroces pero nosotros comimos un poco de tapeo variado. Rabas, bonito, secreto ibérico...



Paseíto hasta el apartamento que estaba al lado de la Plaza Mayor.

El viernes más paseo por el Mercado del Val, Museo de Escultura, Universidad...y para tomar el aperitivo nos desplazamos en autobús hasta el barrio de los Pajarillos en donde tiene un bar un amigo. El bar se llama La Troje y es auténtico bar de barrio con personal variopinto y muy buenas tapas.

El chico que nos alquilaba el apartamento me dio bastantes referencias gastronómicas y culturales
Recomendaciones culturales  https://www.minube.com/tips/actualidad/lo-mejor-de-valladolid-14-rincones-imprescindibles 
Recomendaciones gastronómicas https://www.traveler.es/gastronomia/articulos/valladolid-de-tapas-donde-comer-mejores-restaurantes/13954
El chico nos recomendaba el 2, 3, 4, 7 y 9 especialmente.

Probamos el pincho Los Tres Cerditos de Villa Paramesa, muy rico y con una presentación muy original. La croqueta de jamón y el pincho de bacalao de El Corcho (un clásico) y, ya para rematar, una croqueta de papada ibérica y trufa en El Peso. Todos muy cerquita de la Plaza Mayor.

Valladolid es una ciudad muy cómoda y tranquila, sin cuestas y con poco turismo cosas ambas que los toledanos apreciamos mucho. La temperatura que hemos tenido ha sido perfecta, así que los paseítos y las copitas en cualquiera de las mil terrazas han sido nuestras únicas tareas.

El sábado teníamos reservado un freetour con Civitatis como casi siempre hacemos últimamente en los viajes. nunca nos han defraudado y esta vez tampoco. Nos guió Ana, una vallisoletana simpatiquísima y graciosa, por todos los lugares emblemáticos del centro. Perfecto y ameno paseo. 

Estos apuntes nos los pasó ella por email.



Terminado el paseo guiado seguimos por nuestra cuenta caminando hacia el río. Queríamos ver la playa vallisoletana (para envidia nuestra). No vimos a nadie bañándose pero sí a bastante gente tomando el sol tranquilamente. 


Para comer habíamos reservado (por pura recomendación de comentarios en Google) un sitio para comer brochetas de lechazo (yo no) con parrilla al lado del Canal de Castilla. No está céntrico pero en un paseo estás allí. Se llama Costa del Piñón y lo recomiendo. Por el entorno, la calidad y el precio.
Es como un merendero grande que estaba lleno de grupos familiares pero también una terraza al borde del canal muy agradable. Un acierto.






Una curiosidad sobre el nombre de este restaurante.

La expresión "costa del piñón" se usaba antiguamente para referirse a la zona de Tierra de Pinares, donde se encuentran paisajes con pinares, llanuras y atardeceres notables según Costa del PiñónSe asocia a un lugar para pasar las vacaciones de verano en este entorno. Además, en Tierra de Pinares se prepara comida tradicional castellana, incluyendo platos con oveja churra, una raza local. 


Bueno, ya tenéis referencias por si os apetece hacer una escapadilla a esta ciudad castellana tan cómoda y agradable.



martes, mayo 27, 2025

ALTEA 2025: Otra experiencia más a la mochila.

 Este año, para mi escapada larga y compartida de todos los años, elegí Altea. Ha sido un acierto pues el pueblo está precioso y con muy buen ambiente. Una mezcla de turistas, guiris afincados y personal autóctono acogedor.

El apartamento (Airbnb) era genial y con unas vistas al mar increíbles.







Me ha llamado mucho la atención la amabilidad de toda la gente con la que hablé, en el mercado y en los bares. Todas las recomendaciones que nos hicieron fueron de lo más acertadas y ello nos ha permitido disfrutar de un nivel gastronómico excelente.

Bueno, además de los paseos por el inmenso paseo marítimo y por el pueblo antiguo que es precioso, os recomiendo la excursión al faro del Albir. 






Mi amigo Rafa (que ha visitado todos los faros de la península) me recomendó este especialmente por el paseo tan agradable que hay hasta llegar al faro en cuestión y por la ubicación y vistas que tiene. Además hay un chico que trabaja allí (no como farero sino como punto de información) majísimo y conocedor a fondo de la zona a pesar de ser madrileño. El paseo es de 2,50 km. de ida y los mismos de vuelta si vas en coche hasta el parking y algo más si haces todo el recorrido a pie. Muy recomendable.










El pueblo antiguo de Altea también tiene unos paseos buenísimos y además haces piernas a lo grande (pura cuesta y escalón). Se mantiene muy bien cuidado y al estar todo pintado de blanco cualquier planta o decorado resalta muchísimo. Hay un montón de terrazas y tiendas de ropa, souvenirs, decoración, etc. En general muy estilosas y originales. Supongo que el hecho de convivir con una facultad de Bellas Artes influirá en este gusto especial. 










En fin, una estancia de lo más agradable y tranquila por todo. Además de por todo lo anterior, por la comida (¡Cómo no!) y por la compañía. Ahora os dejo constancia para que toméis nota:

La Capella (en el pueblo antiguo) , excelentes arroces y entrantes. Original y no muy caro.
Los Jazmines cocina casera tradicional riquísima y a muy buen precio. Arroz con alcachofas y pulpo, clochinas al vapor, verduritas en tempura...estupendamente atendido por un personal de lo más simpático.
Mesón Racó de Toni (en una callecita paralela al Paaseo Marítimo) buenos pescados frescos y arroces, por supuesto.
Tapería Ca Pere (al comienzo del pueblo antiguo) fritura de pescado rica y abundante, ensaladas.
Olla beach bar, (queríamos ir al restaurante El Cranc que nos habían recomendado pero siempre está lleno y nos quedamos en este al lado) no me fijé si tienen arroces pero es más de raciones. Tomamos un vitel toné, una ensalada de quinoa y una "lasagna" de tomate fresco con anchoas y tapenade de aceitunas. algo distinto pero muy rico y, como siempre, bien atendido.
Mon restaurant Boutique. Aquí tomamos un menú del día muy rico y a buen precio pero bueno, nada especial. Es también tienda de vinos y productos de la zona y está al lado de la iglesia.
Restobar Casa del mar. En pleno paseo marítimo es un sitio muy "mono" para tomarte unas raciones (croquetas, alcachofas, gambas)
L'Airet. Este restaurante es todo un misterio. Nos lo recomendaron unos del pueblo como un clásico pero en Google aparecía cerrado, no obstante llamamos y ¡Oh! contestan y nos reservan. No sé si sería por el puente del 1 de mayo o qué pero luego lo he intentado otras veces y nada, no contestan. Muy recomendable por sus arroces, calamar a la plancha, alcachofas...y también a muy buen precio.

Bueno, no sé si se me olvida alguno pero ya es una suerte que en tantos días comiendo fuera no tenga ninguna pega que poner en un ámbito tan reducido. 

Y si a esto le añadimos un mercado con frutas, pescados, carnes, salazones para hacerte cenitas en la terraza de casa....pues ¿Qué más se puede pedir?





miércoles, marzo 19, 2025

GRANADA EN 2025 (Visita corta pero novedosa)

 El año pasado el sobrino Ulises tuvo la buena idea de alquilarse un pisito en Granada. Tiene allí buenos amigos y en sus ratos libres puede practicar y compartir su afición al pandero cuadrado. 

Unos ojos nuevos para disfrutar de algunos sitios ya conocidos de esta ciudad tan agradable.

Alquilé un apartamento en la zona del Realejo. Cómodo y a mano de todo. El taxista que nos trajo de la estación del AVE nos recomendó una churrería cercana muy famosa que se llama El Fútbol y que, por supuesto, probamos en cuanto pudimos. La afición por los churros de los "granaínos" me ha llamado bastante la atención pues, además de haber muchas cafeterías- churrerías, todas están llenas incluso con largas colas para sentarse. Para muestra este link de "Chikigranada" https://chikigranada.com/churros-granada/ en el que nombra 12 churrerías como  las mejores.


En nuestro primer paseo partimos andando del Realejo hacia la Alhambra, sube que te sube hasta llegar al parking. No pretendíamos visitar este monumento sino caminar entre los montes que la rodean. Llegamos hasta la Silla del Moro y de ahí queríamos regresar, monte a través, a la ciudad, al Paseo de los Tristes. En esos montes hay muchos senderos y rutas de diferente longitud pero nuestra intención era bajar directamente (o lo más directo que pudiéramos) al río Darro. Fuimos preguntando a varias personas que nos encontrábamos de frente y aunque con poca precisión, nos confirmaban que sí se podía hacer. Bueno, al final lo conseguimos, existe una vereda con cierta pendiente que baja hasta el Centro de Arte Joven de Granada. Muy recomendable este paseo por la vista panorámica de toda la ciudad en sus diferentes versiones.




Para comer habíamos reservado en un restaurante que se llama "Versos sueltos" Versos sueltos , pequeño, creo que máximo 12 personas pueden comer. 

La tarde anterior me llamaron para proponernos un menú especial dedicado al cine español ya que en pocos días se va a celebrar en Granada la gala de los Goya. 49 euros un menú degustación de 10 platos diferentes, sin bebida. Para los tiempos que corren me pareció muy buen precio.
Así que, después de una cervecita al sol en el Paseo de los Tristes, nos encaminamos para allá.


El menú muy variado y rico además de chistosas las referencias a películas muy conocidas.
Por ejemplo: 
TODO SOBRE MI MADRE "Uno es más auténtico cuanto más se parece a lo que ha soñado de sí mismo" plato; croqueta de puchero.
BAJARSE AL MORO "Con un porro todo el mundo es hermano" plato: lingote de cordero y couscous vegetal
Y ya, la cachondada total. AIRBAG "La primera norma del club de hombres con suerte es que no se habla del club" prepostre. Aquí os dejo la foto para que la interpretéis.



Después de comer tomamos la copilla en la terraza del Lemon Rock un bar de copas y actuaciones muy concurrido. Lo conocí en mi estancia de un mes en Granada el año 2019 (creo) porque el pisazo que alquilé estaba justo enfrente. 

El sábado hicimos un poco de turismo cultural visitando el Real Monasterio de San Jerónimo, muy recomendable.

La comida fue en un clásico: La Botillería un jamón excelente y otras delicias tradicionales. Gracias a Cristina que nos invitó.

Paseando, paseando llegamos al Kiosko Las Titas una joyita para tomar una copa de lo más agradable.


Bueno, un finde largo de lo más agradable y completo.